viernes, 3 de noviembre de 2017

Carta de amor de un fantasma







 El fantasma escribía una carta; cuando la terminó, se la entregó con un gesto amoroso.

Al intentar leerla, el escritor descubrió que la página estaba en blanco. 

sábado, 11 de febrero de 2017

Atrapado


                                                   El viajero prodigioso
                                                                     - Xul Solar -



El hombre escuchó el disparo. El repentino dolor en el pecho y el calor de la sangre fueron el dato
que completó la ecuación: esa bala era para él. El cemento de la calle se precipitó a su encuentro. Cerró los ojos y espero no ser. La muerte ya no tenía importancia; no  pensaba rendirle a nadie cuentas de sus actos. Tal vez, después de todo, hundirse en el olvido era lo mejor que le podía haber ocurrido.
Oscuridad, pozo, silencio y su conciencia percibiéndolo todo. Algo está mal, pensó, aún existo. Fue entonces cuando ocurrió: las mujeres surgieron de la nada. 
Las mujeres flotaban en un espacio hecho de agua y silencios. Una fría maldad se distinguía en el fondo de sus ojos oscuros. Las largas cabelleras rojizas y las verdes alas membranosas ahuyentaban cualquier visión del paraíso.  Con las manos abiertas, como si siguieran el ritmo de una invisible melodía, avanzaban cantando, mientras agitaban cadenas de oro y otros objetos innombrables.
Las vio acercarse y quiso huir, pero se descubrió paralizado, inerte, indefenso. Pudo sentir el áspero roce de sus ropajes y el golpetear de sus cadenas, cuando atravesaron su cuerpo una y otra vez. Sus armas parecieron hundirse en él. La tibia, gelatinosa agua azulada penetró por todos sus huecos, por todas sus heridas.
Después, oscuridad. Pozo. Silencio. Su conciencia, alerta, presintió el regreso de la luz y con ella, a las mujeres, que nuevamente, avanzaban cantando. Esta vez, aunque no lo miraran ni le hablaran siquiera, ansió el roce, los golpes y las heridas. Permaneció quieto, palpitando en la espera.

Solo una cosa le molestaba: que por sobre esos tenues sonidos ahogados, le llegara, desde muy lejos, el insistente ulular de la sirena de una ambulancia.

                                                                                                                Diciembre de 2015